miércoles, 25 de agosto de 2010
Cóctel cumbiointelectual
Después de un teórico de Seminario de cultura popular y masiva me retiré de mi amada Facultad de Sociales para emprender el regreso a casa. Me tomé el 65. Por suerte, un asiento vacío. Pelo los auriculares, prendo mi celular que hace las veces de reproductor de música y saco el libro. Puse un tema de cumbia. Sí, de cumbia. Aclaro lo de un tema porque no es que me puse a escuchar la selección de los 100 mejores temas de cumbia sino uno que tenía por ahí suelto -esto no porque me avergüence sino porque pecaría de excesivamente careta-. Me di cuenta la genialidad de salir de una clase de cultura popular masiva y ponerme a escuchar cumbia, nunca más acorde. Pero lo aún mejor fue darme cuenta que estaba leyendo Cortázar al son de "ella no duermeee, no sale, no come, no ríe, no dice nadaaaa". Sí, es posible, Cortázar y cumbia. Viva las contradicciones. Viva el original. Viva Cortázar (y el obvio VIVA P...lo dejo para que lo complete mi querida sardina).
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...ERON, carajo!!!!
ResponderEliminarTe dejo un temita, http://www.youtube.com/watch?v=_d4Bsw8NZ68
Claramente alterego, amiga mía, siempre dije que ese tema me representaba en mi más íntima esencia...
Bueh, no hace falta aclarar que el comentario anterior lo escribí yo, porque hay muchas marcas sardinas en él... jajaja!
ResponderEliminarjajajajajajja
ResponderEliminarclaramente mi sardina querida, claramente
Vení a dormir conmigo:
ResponderEliminarno haremos el amor, él nos hará.
Cortázar.